En relación a la prevención de cualquier situación de acoso sexual en el ámbito deportivo, y con el fin de promocionar “Espacios de Deporte Seguro”, la Empresa Pública para la Gestión del Turismo y del Deporte de Andalucía, propone a todas las federaciones, clubes y escuelas deportivas, adoptar una serie de medidas generales dictadas por el propio COI:
Creación de políticas claras y códigos de conducta
Consensuar y aprobar políticas claras en materia de prevención y actuación contra el acoso sexual, cuyo objetivo sea promocionar espacios deportivos seguros. Para ello se recomienda:
- Elaborar códigos de conducta, los cuales tendrán que ser acatados por todo el personal trabajador, así como por personas usuarias, en los que se recoja:
- Una explicación clara de aquellos contactos físicos inadecuados que deben evitar en sus interacciones con las personas deportistas usuarias de las instalaciones o acontecimiento deportivo.
- Una descripción detallada y pormenorizada de aquellas conductas y situaciones que son claramente susceptibles de ser un tipo de acoso sexual y que sean perpetuadas sobre deportistas, compañeros/as de trabajo o cualquier otra persona.
- Una descripción clara y detallada de las medidas punitivas y penalizaciones a las que pueden llegar a enfrentarse si cometen cualquier conducta inadecuada o son responsables de cualquier tipo de acoso sexual hacia otra persona.
- Elaboración de protocolos específicos de prevención y actuación frente al acoso sexual (véase el apartado “Protocolo de actuación”).
- Creación de una UPA (Unidad de Protección frente al Acoso) o como mínimo de la figura de “delegado/a de protección” con formación específica en la materia.
- Existencia de un documento oficial de petición de ayuda que recoja los datos de la persona solicitante, de la persona afectada (en el caso de que sea diferente a la solicitante) y de la descripción de los hechos.
La existencia de una UPA (Unidad de Protección frente al Acoso) o de al menos la figura de “delegado/a de protección”, garantiza la atención personalizada, confidencial y ágil a las posibles víctimas de acoso sexual.
Sus funciones principales son:
- Liderar los trabajos de desarrollo e implantación de las políticas de protección contra la violencia sexual dentro de la entidad deportiva y asegurar su correcta implantación, monitorización y actualización periódica.
- Tramitar el procedimiento de actuación previsto en el protocolo de actuación.
- Realizar periódicamente evaluaciones de riesgos en la entidad deportiva y desarrollar un plan de minimización de dichos riesgos que deberá involucrar a todo el personal trabajador.
- Asegurar que todas las personas de la entidad deportiva, conozcan los protocolos y las políticas de protección.
- Asesorar a la dirección de la entidad deportiva sobre las necesidades de formación, manteniendo un registro del personal que ha completado la misma.
- Actuar como punto de contacto dentro de la entidad deportiva de cara a agentes de otras entidades u organizaciones en todo lo relacionado con la protección de las personas deportistas.
- Crear un registro de todos los casos de acoso sexual que se den dentro de la entidad deportiva.
Formación y educación continua
- Disponer de un programa formativo específico en materia de acoso sexual, en el que toda la plantilla trabajadora deberá capacitarse, de manera que adquiera las competencias necesarias para identificar rápidamente cualquier señal que sea susceptible de constituir una situación de acoso sexual. En relación a la especial relevancia del personal entrenador en materia de acoso sexual, deberá certificar haber realizado programas preventivos que fomenten prácticas positivas y eficaces de entrenamientos y dirección técnica y cuyos contenidos están orientados principalmente a:
- Diferenciar métodos de entrenamiento de alta intensidad y métodos abusivos constituyentes de conductas inapropiadas o de acoso sexual.
- Diferenciar entre estilos comunicativos asertivos y estilos comunicativos susceptibles de constituir una forma de acoso sexual.
- Celebrar charlas divulgativas, jornadas o talleres destinados a deportistas y otras personas usuarias, con el objetivo de sensibilizar sobre violencia sexual en el deporte, sobre cuáles son los límites de las relaciones interpersonales y sobre los códigos de conducta y las normativas de la entidad respecto a esta cuestión.
Fomento de un ambiente de respeto y seguridad
La creación de un ambiente seguro es crucial a la hora de prevenir cualquier tipo de conducta inapropiada y por supuesto, cualquier situación de acoso sexual. Por ello, se recomienda:
- Asegurar que cualquier persona trabajadora tenga el perfil personal y profesional más adecuado al desarrollo de las funciones para las cuales ha sido contratada.
- Garantizar que todos los equipos técnicos sean mixtos, dado que se ha demostrado que la prevalencia de situaciones de acoso sexual es menor cuando existe paridad de género (60/40) dentro de dichos equipos.
- Promocionar un clima de reflexión abierto sobre cualquier tema relacionado con el acoso sexual, para que cualquier persona deportista o relacionada con la entidad deportiva, se sienta en la confianza de poder hablar sobre sus dudas al respecto e incluso verbalizar las posibles situaciones de las que está siendo víctima o de las cuales está siendo testigo.
- Facilitar el acceso a la información existente (códigos de buenas conductas, protocolos de actuación, etc.) a cualquier persona relacionada con la entidad y, sobre todo, a las personas usuarias.